Una vez concluidas las XIX Jornadas de la AIP, celebradas en Jaén bajo el título La memoria de los lugares. La interpretación del patrimonio y el derecho al paisaje, ya están disponibles las conclusiones elaboradas por el equipo de relatoras que tan intensamente ha trabajado los contenidos.

No sólo han elaborado un estupendo documento de conclusiones, sino que también han recopilado las contribuciones realizadas durante el taller de elaboración de conclusiones celebrado durante las jornadas. Su proceso de síntesis creativa ha concluido en el documento que os compartimos a continuación,  titulado Atlas de nuestra memoria.

Muchísimas gracias al equipo de relatoras compuesto por Mavi, Mati y Boli por su dedicación, implicación, tiempo y esfuerzo  ¡Gran trabajo!

 

Aquí te puedes descargar la documentación:

Atlas de nuestra memoria: libro digital colaborativo que recoge nuestra memoria de las jornadas.

Conclusiones_XIX_Jornadas_de_la_AIP_-_Jaén_2020: La interpretación del patrimonio y el derecho al paisaje.

 

Resumen de las principales conclusiones

En el documento de conclusiones disponible para descarga encontrarás información detallada sobre todos los contenidos de las jornadas. A continuación te resumimos las principales:

  • En el concepto de paisaje confluyen los aspectos ambiental, comunal e individual. Teniendo en cuenta esta triple perspectiva, la disciplina de la interpretación del patrimonio puede contribuir en la gestión y comunicación de las distintas dimensiones y valores del paisaje.
  • En esta gestión y comunicación resulta necesaria una visión holística, que permita entender el patrimonio como conjunto y no como una serie de recursos aislados e inconexos. Para ello, es fundamental reunir aportaciones y enfoques procedentes de diversos ámbitos (medio ambiente, economía, urbanismo, vivienda, cultura, patrimonio material e inmaterial, antropología, historia, turismo, por citar algunos ejemplos).
  • La divulgación de los valores del paisaje ha de ser transversal a la población local y al visitante, pues debe transmitir lo que resulta significativo para las personas. Por tanto, se impone un enfoque de abajo-arriba, recurriendo a procesos participativos como base de las estrategias de interpretación del patrimonio.
  • Es importante trabajar a partir de las experiencias, sentimientos y emociones de las personas. Para ello es fundamental hacerlo de forma creativa y tratando de entender un todo en su conjunto, para sus propios protagonistas lo conozcan y lo valoren.
  • Estas estrategias centradas en la memoria y las emociones van dirigidas a provocar identificación y aprecio hacia patrimonios cotidianos, patrimonios cuyo sentido y significación se pierden con el actual modo de vida, más apresurado e individual.
  • Es necesario cuidar la relación entre paisaje e identidad, pues de la identificación y el aprecio por los lugares es el germen de la conciencia sobre la necesidad de preservación.
  • Responsables técnicos y políticos deben dispensar un mejor trato al paisaje.